Las investigaciones muestran que los niños tienen más probabilidades de recordar las reglas y las habilidades si las practican. Estas son algunas sugerencias de cómo hacerlo.
Repaso
Repase con frecuencia las reglas sobre las partes privadas del cuerpo que tienen en su familia y recuérdele a su niño o niña que:
- Tú nunca tienes la culpa si otra persona rompe la Regla sobre Toques.
- Nunca guardes secretos sobre toques.
- Nunca es demasiado tarde para hablar sobre un problema de toques.
Práctica
Para practicar la Regla Siempre Pide Permiso Primero, pida a su niño o niña que le diga qué haría en las situaciones siguientes:
- ¿Qué harías si alguien que conoces te ofrece llevarte a casa en su carro?
- ¿Qué harías si estuvieras en el parque y alguien a quien no conoces te pide ayuda para buscar una pelota, un perrito o un gatito que se perdió?
- ¿Qué harías si tu entrenador te da un regalo inesperado?
- ¿Qué harías si un vecino quiere que vayas a su casa a comer algo?
Recuérdele a su niño o niña que la regla se usa también con las personas que ustedes dos conocen. A medida que su niño o niña crece, la regla se puede adaptar a “siempre mantenerse en contacto” así usted sabrá dónde y con quién está.
Use “¿Qué harías sí…?”
Pueden practicar las reglas de seguridad familiares jugando a “qué harías si…”. Comience con situaciones de seguridad general, como:
- ¿Qué harías si tu amigo quiere que juegues con un encendedor?
- ¿Qué harías si alguien quiere que agarres un arma?
- ¿Qué harías si alguien te reta a saltar al río?
Pida a sus niños que actúen representando qué harían y diciendo palabras reales que significan no y luego diciéndoselo a un adulto de confianza inmediatamente. Pida a sus niños que usen sus habilidades de firmeza (vea abajo) y que practiquen las palabras que usarían para decirlo. Pregunte: “¿Qué otra cosa podrías decir?”, “¿A quién más podrías decírselo?”. Cuando su niño o niña se sienta cómodo con situaciones de seguridad general, amplíe la práctica e incluya situaciones sobre toques. Asegúrese de que las situaciones sean concretas e incluya personas que conozcan y personas que no conozcan. Estos son algunos ejemplos para comenzar.
- ¿Qué harías si un niño más grande que vive en nuestro vecindario quisiera jugar un juego de toques contigo?
- ¿Qué harías si tu primo te agarra tus partes privadas mientras está jugando contigo?
- ¿Qué harías si alguien que conocías y te caía bien rompe la regla sobre las partes privadas del cuerpo?
Los niños también pueden proponer preguntas “qué harías si…”. Acepte todas sus sugerencias y hablen y practiquen qué deberían hacer. Estas ideas pueden ayudarlo a usted a saber qué situaciones pueden preocupar a su niño o niña.
Enseñar firmeza
Enseñe firmeza al mismo tiempo que practica las situaciones “qué harías si…”, esto ayudará a su niño o niña a resistir frente a situaciones no seguras de manera más efectiva. Un comportamiento firme incluye lo siguiente:
- parase derecho(a), con la cabeza y los hombros levantados
- mirar directamente a la otra persona
- hablar con un tono de voz firme y calmado
- usar palabras respetuosas
Aprender a ser firme toma tiempo. Cada vez que su niño o niña practique decir palabras que significan no, anímelo a ser firme. Dígale qué partes está haciendo bien y en qué partes necesita más práctica.
¿Enseñan reglas de seguridad en la escuela de su niño o niña? ¿Está el personal capacitado para reconocer y reportar señales de abuso? ¿Implementan la política y los procedimientos correctos para mantener a los niños seguros? Si no es así, recomiéndeles la Unidad Protección Infantil del programa Second Step.